Tanto si eres un particular como un intermediario autorizado, estarás acostumbrado a ver los medicamentos para animales envasados. Los recibes de los laboratorios, etiquetados, marcados, recubiertos y con sus prospectos e instrucciones de uso. Incluso los veterinarios, que son los que los administran, conocen la composición y los efectos de los medicamentos, están acostumbrados a verlos así. Son muy conscientes de lo que producen los mismos en los animales, gracias a los principios activos y los efectos que tienen estos en los animales. Pues esto es, porque parte de su formación se basa en eso. Pero… ¿Qué hay antes de todo esto? ¿Cómo llega un medicamento o un fármaco para animales a estar en su envase, recubierto y con sus instrucciones de uso en la caja? ¿Qué era antes de todo eso y cómo se calcula lo que debe llevar de cada componente? Para dar respuesta a todas estas preguntas hoy te contamos cómo es el proceso de fabricación de un fármaco para animales, y qué pasos se siguen, para que los distribuidores y los veterinarios puedan acceder a los medicamentos ya envasados.
El proceso de fabricación de un fármaco para animales
Qué es un fármaco para animales
Lo primero que debemos aclarar es el concepto de fármaco para animales, o medicamento veterinario. El medicamento veterinario es toda preparación o producto farmacéutico empleado para la prevención, diagnóstico y/o tratamiento de una enfermedad o estado patológico, o para modificar sistemas fisiológicos en beneficio del animal al que se le administra.
Por lo tanto, todos aquellos suplementos, cremas, geles, complementos especiales para el cuidado y salud de los animales que no tengan como objetivo curar o prevenir una enfermedad, no son fármacos para animales.
Las fases del proceso de fabricación de un fármaco para animales
Pesaje del principio activo y excipientes
Cada medicamento va a tener especificado un principio activo, que será la parte principal de la fórmula del medicamento. Con este principio activo y el resto de ingredientes, denominados excipientes, se conforma la totalidad de la fórmula del medicamento. El pesaje de cada elemento es esencial para completar la fórmula, pues es aquí donde reside el poder del medicamento, en la correcta formulación de las cantidades de los componentes.
Granulación de los ingredientes
Una vez corroborado el pesaje, y ajustado el principio activo junto con el resto de elementos de la fórmula, tiene lugar la siguiente fase. Para poder mezclar todos los componentes, se disuelven en una solución, convirtiendo la mezcla en un granulado húmedo. Esto se realiza mediante la introducción de la misma en agitadores, que lo mezclan a más de 200 revoluciones por minuto, para asegurar una correcta disolución igualitaria del granulado.
Secado de la mezcla
Con esta mezcla granulada y húmeda, se procede a realizar un secado parcial de la misma. Esta función tiene lugar debido a que es necesario mantener cierto grado de humedad dentro de la fórmula. Por este motivo debe secarse con aire filtrado y caliente, a través de maquinaria que puede mover hasta 800m cúbicos de aire por hora.
Tamizado del granulado
Cada medicamento va a necesitar un tamaño de gránulo específico, por lo que es necesario tamizarlo para obtener esta medida concreta.
Mezclado del granulado
Una vez obtenido el gránulo del tamiz, nuevamente se le añaden nuevos excipientes con el objetivo de poder ejercer su futura compresión hasta lograr su perfecta homogeneidad. La mezcla con los excipientes finales se realiza en un depósito donde se miden la velocidad y el tiempo de giro del mismo.
Compresión homogénea
Para obtener los comprimidos o pastillas que conocemos, la mezcla se somete a grandes presiones hasta que toma la forma, homogeneidad y textura que estaba pensada para ese fármaco o medicamento en cuestión. Este proceso se lleva cabo en esta fase, gracias a la maquinaria necesaria específica utilizada en este punto, pero sobre todo gracias a los excipientes añadidos con anterioridad. Estos excipientes, son los que permiten la textura y compresión de los medicamentos para animales.
Recubrimiento o revestimiento
En algunos casos los comprimidos se recubren, se encapsulan o se revisten, con una capa para realizar una función de liberación prolongada, protección del exterior a través de una barrera física o para evitar su descomposición. Esto ya depende del fabricante, de las necesidades que se soliciten, o de como vaya a ser el envasado en cuestión.
Envasado
Ya solo queda envasar los fármacos correctamente y distribuir. Dependiendo también del fabricante, el laboratorio o el envío. Puede llevarse a cabo el envasado en blíster, en cajas, botes de cristal o botes de plástico.
Distribución a clínicas veterinarias e intermediarios autorizados
En Zoomedic nos quedamos en este punto y es aquí donde contactamos con los laboratorios, para distribuir a cliente final o a intermediarios autorizados. Tenemos contacto con múltiples laboratorios nacionales e internacionales, para conocer más a fondo su forma de trabajar. De esta manera estaremos más cerca de encontrar soluciones biológicas para todas las especies, y conseguir la diversidad de especies que tanto se hace desear.
